Tuesday, November 21, 2006

Hijo de Putin

En 2003 el primer ministro de Chechenia, Anatoli Popov, en agudo conflicto con los militares rusos, sufrió un misterioso envenenamiento, del que logró salvarse gracias a los médicos del Hospital Clínico de Moscú.
En 2004 el hoy presidente ucrananiano, Víctor Yúschenko, fue envenenado durante una cena con altos cargos de los servicios secretos.
Anna Politskovkaya fue encontrada muerta en su domicilio de Moscú mientras preparaba un artículo sobre las torturas sistemáticas en Chechenia.
Tras tres semanas en el hospital, los médicos han confirmado que Alexander Litvinenko, exagente del KGB, ha ingerido una dosis tres veces superior al límite tolerable de una sustancia tóxica que le ha dejado al borde la muerte.
Qué manía estos rusos de ponerle talio a las ensaladas, por no gastarse unos rublos en aceite de oliva vírgen extra.

1 comment:

Anonymous said...

creo que lo intentaron con la margarina 100% vegetal rebosante de grasas trans, pero se morían muuuy despacio.
Al cabo de 20 o 30 años, incluso.